Gabriel Gómez llegó con el deseo de hacer historia

Gómez se considera un volante mixto con buen remate de media distancia, e indica que marcará goles con Junior.

POR ELHERALDO.CO

Con el deseo de volar alto y de hacer historia en el Junior llegó a Barranquilla el mediocampista panameño Gabriel Gómez.El volante, de 28 años, viene procedente del Philadelphia Union de la MLS y en su trayectoria como futbolista cuenta con un recorrido de diez años que incluye tres clubes colombianos, Envigado, Pereira, Santa Fe y Equidad. En el equipo asegurador estuvo bajo las órdenes de Alexis García con quien se reencontrará, esta vez con objetivos más grandes.

A su arribo a la capital del Atlántico, Gabriel Gavilán Gómez expresó su satisfacción al ser tenido en cuenta por los directivos y el cuerpo técnico del cuadro currambero. “Me siento feliz por estar en un equipo muy grande, con una hinchada tan grande y en una ciudad de mucho fútbol.
Espero tener éxito este año”, afirmó el volante mixto.
Gómez catalogó como una ventaja que Alexis García sea el timonel del Junior de Barranquilla ya que el estratega chocoano conoce sus capacidades, lo que fue fundamental para su contratación. “Conocer al profesor Alexis, su trabajo y cuerpo técnico y la grandeza de Junior hizo posible que yo viniera. Es un gran reto y espero asumirlo con responsabilidad”, aseguró.

El volante apuntó que su llegada a la institución rojiblanca no solo fue gracias al respaldo del actual estratega sino también a pedido del presidente de la institución Antonio Char, quien anteriormente estaba estudiando la posibilidad de incorporarlo al equipo.

Con relación a los nuevos jugadores que se han sumado al equipo barranquillero, señala que todos están preparados para alcanzar los objetivos trazados. “Es un equipo que se está armando para que los jugadores vengan aportar y conseguir los objetivos, con sentido de pertenencia, amor propio para con esta institución y vamos a trabajar para que así sea”, indicó.

Al ser interrogado por su remoquete, Gabriel Gómez recuerda su infancia en Panamá junto a su familia. “Desde muy pequeño me dicen así. Mi padre dice que cuando llegaba del colegio ya no estaba en la casa porque me iba a jugar con los amigos. El Gavilán remata con contundencia, “yo espero volar muy alto en Barranquilla, para así tatuarme la octava”.