jueves, 28 de junio de 2012

Ya viene la Superliga y aún no llegan los refuerzos de Junior



El plantel dirigido por José Eugenio Hernández trabaja desde el pasado 15 de junio con nuevo cuerpo técnico. Pero aún no suma el primer refuerzo. El 18 de julio jugará el primer duelo de la Superliga.
Esteban Gesto, Preparador Físico procedente del Deportes Tolima, Jhon Jairo Escobar, Asistente Técnico que estaba vinculado al Atlético Huila y Diego Rojas preparador de arqueros que venía trabajando con el Boyacá Chicó, son los únicos nombres nuevos que suenan en los entrenamientos de Junior, de resto no se han presentado novedades para el segundo semestre donde disputará el título de la Superliga y la Liga Postobón II.
Los días pasan y entre rumores e ilusiones se la pasan los hinchas de Junior aguardando por la llegada de refuerzos, en especial uno o dos defensas experimentados y por supuesto un goleador de raza. Pero aún no se revelan contrataciones.
El único nombre que ha expresado sin reservas el DT ‘Cheché’ Hernández es el de Teófilo Gutiérrez, pero aún no hay humo blanco. Por otro lado, el estratega sólo manifestó que le pidió a la junta directa un defensa central y un volante mixto.
Sobre el jugador que estará en el medio campo, el DT juniorista expresó que quiere a un verdadero líder y afirmó que al que busca para ocupar esa posición es a un jugador uruguayo, de Selección y que actúa en el fútbol internacional. Aunque no quiso revelar el nombre para no entorpecer la negociación dijo que en los próximos días lo hará saber.
Junior disputará la Superliga contra Atlético Nacional, ambos campeones de la Liga Postobón 2011 - I y 2011 - II, respectivamente.
El partido de ida se jugará en el estadio Metropolitano de Barranquilla el 18 de julio y la vuelta será en el Atanasio Girardot de Medellín el 22 del mismo mes.
La posibilidad de conseguir un nuevo título está en juego y parece que para los directivos de Junior no hay afanes, pues aunque se cuenta con una buena base es necesario reforzarla porque con eso no alcanzó para clasificar ni a los cuadrangulares de Liga Postobón I, ni a los octavos de la Copa Libertadores.
El rival se prepara
Atlético Nacional trabaja bajo las órdenes de Juan Carlos Osorio, tiene sed de revancha por la desastrosa presentación que hizo el primer semestre quedando por fuera de Copa Libertadores y Liga Postobón, luego de haber hecho una millonaria inversión en su nómina.
Pero atrás dejaron el primer semestre del año y con la Superliga esperan comenzar de una mejor manera. Ya suman dos refuerzos, ambos delanteros. Jhon Freddy Pajoy ex Once Caldas (23 años y 15 goles) y al goleador del Torneo Postobón Jéfferson Duque (20 goles en el semestre con Rionegro).

  El cuadro verdolaga regresó de unas cortas vacaciones el pasado sábado 23 de junio y tiene programado partidos amistosos contra Bucaramanga y Pumas de México para ponerse a tono previo a enfrentar a Junior por el título de la Súper Liga.
Vlado Galofre Moré - @VladoGalofre
LaTitular.com

BUSCANDO A PEKERMAN (.....PARA VER SI SABE LO QUE DEBE SABER)



por  HUGO ILLERA
INFORMADORES DEPORTIVOS
DIARIO DEPORTES
RADIO CURRAMBA

Pensé que Pekerman estaba en Bogotá pero un dirigente me dijo que no sabía. Pensé que Pekerman estaba en Buenos Aires y un periodista argentino me dijo que no sabía. Un periodista de Bogotá me afirmó que Pekerman estaba en Barranquilla (en mi ciudad) pero los hoteleros, los taxistas y los chismosos del aeropuerto me dijeron que no sabían. Nadie sabe donde está Pekerman. Quise llamar a la esposa pero no sabía su número telefónico. Estamos jodidos. Nadie sabe donde está Pekerman a excepción de su banquero cuando consigna los dólares que le paga la federación. ¿O serán Euros?. Es posible que si le pregunto al banquero me dirá que no sabe.
Recientemente estuvo el preparador físico de la selección en Barranquilla y nadie lo supo. Como que se vino por tierra o disfrazado de marimonda. Acompañado por Joao Herrera hijo visitó hoteles, canchas y los complejos deportivos de las cajas de compensación y se fue. Para dar la noticia comencé a preguntar el nombre del preparador físico. No fue tarea fácil. Un dirigente, no supo. Un periodista que cubre la fuente, no supo. El jefe de prensa de la Secretaria de Deportes, no supo. Tuve que buscar y rebuscar los nombres de los 11 asistentes de Pekerman. Por fin los conseguí atando cabos en Internet puesto que en la página de la federación ¡no están!. Un tal Urtasún, me dijo un periodista amigo. Gabriel no se qué cosa, me dijo otro. Se llama Gabriel Urtasún. Pregunté por qué en Bogotá nadie sabe el bendito nombre de los asesores de Pekerman. La respuesta fue que son tan cerrados y misteriosos que ni saludan a los periodistas.
La última vez que los colombianos tuvimos el honor de ver “al seleccionador nacional” fue sentado en el banco en el estadio de Quito como ido, dormido, mirando lejos, como en éxtasis como una lechuza dormida de día, con los ojos abiertos por supuesto, con la mirada perdida en el horizonte de la confusión futbolística. Y la última vez que escuchamos “al seleccionador nacional” fue en su confusa rueda de prensa, después del juego, donde intentó dar explicaciones y no pudo y donde nos dejó convencidos de por qué perdimos como perdimos. Enredados, sin ideas y fundidos físicamente. Y pesar, pensamos, que a Leonel Álvarez lo tumbo la rueda de prensa en Barranquilla, después de la derrota ante Argentina, y no la derrota en sí. A veces trato de entender por qué Pekerman anda perdido. Creo que la única respuesta que es que, con 11 asesores en el cuerpo técnico, ¿para qué aparece?
En medio de mi búsqueda para saber de Pekerman y tener la oportunidad de entrevistarlo encontré respuestas, de verdad divertidas: lo importante es que aparezca el día del partido, a Pekerman no le gustan las entrevistas individuales, y ¿para qué lo vas a entrevistar? ¡Coño!
Pues quería saber si Pekerman sabe que Barranquilla está sufriendo de tal manera el cambio climático que hasta los nacidos aquí pasamos las de San Quintín por la alta temperatura, la excesiva sensación térmica y la insoportable humedad.
Quería saber si Pekerman sabe que, hoy jueves por ejemplo, a la media noche hay 28 grados de temperatura con 33 grados de sensación térmica y 88 por ciento de humedad.
Quería saber si Pekerman sabe que, en el transcurso del día, a las 7:30 de la mañana, cuando Junior acostumbra a trabajar, hay 27 grados de temperatura, 32 grados de sensación térmica y humedad entre el 90 y el 100%.
Quería saber si Pekerman sabe que, cuando quiera entrenar por la tarde, entre 3:30 y 4:00 PM, hay 32 grados, 39 de sensación térmica y la humedad entre el 90 y el 100%.
Quería saber si Pekerman sabe que, cuando se vaya a dormir a las 10 de la noche, Barranquilla tiene entre 28 y 30 grados de temperatura, de 34 a 36 grados de sensación térmica y humedad entre el 80 y el 90%.
Quería saber si Pekerman sabe que, hace muchas temporadas, que el Junior no hace doble entrenamiento diario a excepción de los días miércoles cuando, para hacerlo, debe programar media concentración en un hotel de la ciudad.
Quería saber si Pekerman sabe que en Junior es de igual de importante la recuperación del jugador que el mismo entrenamiento previo a los juegos.
Quería saber si Pekerman conoce el tema de la recuperación con crioterapia (terapia con hielo) en el intermedio de los juegos y al finalizar los mismos, la misma que utilizó Argentina para ganarnos en Barranquilla con un calor fuera de lo común.
Antes, cuando clasificamos a tres mundiales, Barranquilla era calurosa. Hoy es terriblemente calurosa y, no basta con el fogón del calor, sino la preparación de nuestro seleccionado y la manera como se puede evitar el menor impacto posible en los jugadores. Porque, no solo es tener un estadio caluroso sino un buen equipo, bien preparado y bien recuperado.
Esto me preocupa porque, esta vez para enfrentar a Uruguay, Pekerman y sus 11 de Joselito, solo tendrán a los jugadores dos o tres días antes. Para el doblete con Perú y Ecuador tuvieron al equipo 24 días antes y, la verdad, a Urtasún como que se le fue la mano y vimos a un seleccionado fundido que terminó ahogado en la altura de Quito.
Justamente ese ahogo, hizo que, por fin, la federación le hablara, como debió hablarle siempre a Pekerman, y le desmontaran el tema de jugar con los uruguayos en Bogotá. Algo se quebró, desde el partido con Ecuador, entre la dirigencia y Pekerman. Ya no lo ven tan científico como llegaron a decir algunos. Antes por el contrario, algunos quedaron con la el convencimiento que esa sensación de orfandad, mostrada por él en el banco ante Ecuador, era realmente la muestra que no sabía qué hacer, que planteó mal el partido y decidió mal los cambios.
Vuelvo a la entrevista
Quisiera saber si Pekerman sabe sobre el rendimiento de buenos jugadores jóvenes del medio como Dawlhin Leudo de Equidad, Gustavo Cuellar del Cali y Gilberto García del Pasto y si todavía cree que, como no hay más, hay que poner a Pablo Armero.
Quisiera saber si Pekerman sabe de la buena labor del arquero José Cuadrado en Pasto y del veterano Farid Mondragón en el Cali.
Quisiera saber si Pekerman seguirá ignorando a un goleador de raza como Teófilo Gutiérrez, si llamará a un volante creativo del medio que le de la mano cuando lo necesite y mire al banco y no lo encuentre y si seguirá con los micro ciclos que fueron micro nada porque, de verdad, para nada sirvieron.
Quisiera saber, también, si Pekerman sabe del plan de concentración del seleccionado uruguayo en Panamá para aprovechar la similitud del calor, para que los jugadores no hagan el largo viaje de Europa a Uruguay sino más corto al istmo, si sabe que el Holiday Inn de Punta Paitilla sería su sitio de concentración, que tendrá a la mano para sus entrenamientos a los estadios Rommel Fernández y Agustín Muquita Sánchez y si sabe que el viaje por avión, entre Panamá y Barranquilla, es de solo 30 minutos.
Y por último, quisiera saber si los tres últimos años en que no tuvo trabajo le hicieron mella en su conocimiento, si sus compañeros desarrollaron ideas diferentes porque trabajaron con otros técnicos (los que trabajaron, otros no).
En fin, quisiera saber si Pekerman sabe pero, primero debo encontrar quien sepa donde carajo está Pekerman y segundo deberé convencerlo que me de una entrevista personal como me dieron alguna vez Oscar Washington Tabarez (su próximo rival), Pelé, Maradona, Pibe Valderrama, Lobo Zagallo, Francisco Maturana, Bolillo Gómez, Reinaldo Rueda, Muhammad Alí, Sugar Ray Leonard, Mano de Piedra Durán, Edgar Rentería,  Tony Armas, Julio César Chávez, César Luís Menotti, Carlos Bilardo, Joao Havelange (que interrumpió una reunión en Lima para atendernos), su expatrón Julio Grondona y sus actuales jefes Luís Bedoya y Ramón Jesurún.
Hey, de verdad, ¿dónde carajo está Pekerman?

viernes, 22 de junio de 2012

“Los goles que Junior sub 20 no ha marcado están en mi casa” Iván Valenciano

El ‘Bombarero’ expresó su inconformidad con el cuerpo técnico de Junior por no tener en cuenta a su hijo Aldair Valenciano, quien acaba de ser escogido entre 500 jóvenes para participar en un concurso organizado por la marca deportiva Nike. “El Junior sub 20 ha recibido 7 goles en dos partidos y no han anotado ni uno solo. En mi casa tengo los goles que Junior se ha comido, no sé por qué no quisieron convocar a mi hijo. Tiene 19 años y es un goleador” Dijo el ídolo del cuadro barranquillero a Oxigeno 1010 AM de Cararol en la rueda prensa para el partido amistoso de Showbol de esta noche. Valenciano  expresó su molestia, dijo que no hablaba como padre sino como hincha. Como el que va al estadio y paga una boleta y quiere ver a los mejores. “Cuando nosotros jugábamos, si no lo hacías bien la gente de silbaba, yo lo viví, porque el hincha siempre exige. Si me dicen que (Carlos) Bacca es goleador, le creo porque lo demostró, igual (Martín) Arzuaga. Pero hay jugadores que le dan oportunidades y no demuestran nada”. “Con 19 años y en las menores de Junior ya es para que estuviera fogueándose con el equipo, jugando al menos la Copa Colombia”. Apuntó. Aladir se ganó uno de los dos cupos que entregó el concurso ‘The  Chance’ de Nike en Barranquilla para jugar en Bogotá con escogidos en otras ciudades, y así buscar clasificar entre los mejores de Colombia para ser vistos por el extrenador del FC Barcelona Pep Guardiola en Barcelona, España. “Mi hijo sueña con jugar en Junior,  desafortunadamente no se va a poder ahora porque le negaron la oportunidad de integrar el Sub 20 que viajó a Perú, mucho menos lo van a tener en cuenta en el equipo principal. Por eso tiene que buscar otros horizontes y con este concurso estoy seguro que va a llegar muy lejos. Hablaré con Toño (Antonio Char) para desvincularlo del equipo, Aldair no tiene ningún contrato con el equipo ni nada que lo retenga”. Iván René no entiende por qué su hijo no ha contado con el apoyo del cuerpo técnico de Junior por eso piensa que todo se debe a la “Rosca”. “Cheché no le quiso dar la oportunidad y Pinillos tiene que hacerle caso a Cheché. Pero es raro que un jugador que es escogido entre 500 muchachos en Junior no le den una oportunidad. Luis Muriel le ha brindado mucho apoyo porque también es goleador y sabe lo que significa tener que salir de Barranquilla para buscar oportunidades afuera”. Esta noche en el Coliseo Elias Chegwin Iván René Valenciano integrará el equipo de Los Costeños que se enfrentará ante Los Paisas en un amistoso lleno de espectáculo con grandes figuras en el Shwobol Power. Barranquilla - Junio 16 / 2012. LaTitular.com

martes, 19 de junio de 2012

ES CONTIGO MUCHACHO FUTBOLISTA



POR ALBERTO SALCEDO RAMOS
DIARIO DEPORTES


Te escribo impresionado por las noticias funestas que han protagonizado varios futbolistas colombianos en los últimos días. Entiendo que a tus catorce años el único Dios en el que crees es Messi y el único templo que te interesa es la cancha. Ignoro si te llamas Stiven, Jackson, o Cláyder, pero sé que si te bautizaron con alguno de esos nombres es porque no naciste en la cuna de un magnate. En consecuencia, no viajarás hoy a las Bahamas en yate privado. Tendrás que seguir partiéndote el lomo en el mercado público como ayudante de tu tío matarife.
Quizá a estas alturas estarás creyendo que también yo me burlo de los nombres de ustedes, los futbolistas colombianos. De ninguna manera: los menciono solamente para recordarte tus orígenes humildes. En nuestro país el nombre jamás es lo de menos, muchacho. Muéstrame tu partida de bautismo y te diré los estudios que les faltan a tus viejos, los platos que le faltan a tu mesa.
Los chicos de tu edad que son hijos de ricos ya saben quién fue Abraham Lincoln. Tú no lo sabes pero te llamas Lincoln Martínez. Ahora bien: el fondo de mi mensaje sería el mismo si llevaras un nombre tradicional como Jorge o Pedro.
Volvamos entonces al punto de partida. Dondequiera que estés ahora -en la barriada Belén Rincón de Medellín o en un playón arenoso de Tumaco - seguramente te habrás enterado de ciertas calamidades recientes que te atañen.
Un domingo, al amanecer, fue asesinado el exjugador del Junior Cristian Racero. Otro domingo fue ultimado el jugador de Uniautónoma Álex de Avila (su compañero Herly Alcázar resultó herido). Las dos tragedias tuvieron como factor común que las víctimas se encontraban ebrias en establecimientos inseguros. En ambos casos hubo riñas previas. Como si fuera poco, el jugador Juan Carlos Deusa, del Chicó, pateó a su mujer en una calle de Tunja.
Si me pusiera a recitar la lista completa de los futbolistas asesinados en los últimos años por andar de agresivos, o por frecuentar los antros de la noche, o por involucrarse en negocios turbios, coparía el espacio asignado a esta carta.
Más bien te recuerdo que no naciste en la pacífica Islandia sino en la irascible Colombia. Aquí nos matamos hasta por minucias. Vivir de farra en farra aumenta las posibilidades de ganarse una puñalada o un balazo en la tómbola diaria de nuestra barbarie.
El camino que transitarás está repleto de peligros. Acaso en tu primera experiencia profesional te toparás con este contrasentido: compañeros que dicen haber escogido el fútbol para mantenerse lejos de las drogas, pero cuyos sueldos son pagados por el narcotraficante dueño del equipo.
Bienvenido a tu país, muchacho. Quizá verás matar, quizá verás morir. De nada valdrá que esquives rivales con tu gambeta portentosa, mientras en el campo minado que te espera afuera de la cancha te pongas a dar malos pasos. De nada te servirá que sepas meterle el pecho a la pelota si después no sabes cómo sacárselo a los problemas.

SONAJERO DEL JUNIOR No. 1 Eric Vásquez, defensor




…del Chorrillo FC, vendría a solicitud del DT Cheché Hernández


Por ÁLVARO MARTÍNEZ 
EL SIGLO | Panamá
DIARIO DEPORTES l Barranquilla

Solo falta la firma para que Eric Vásquez, todavía defensor del Chorrillo FC, sea el nuevo refuerzo del Junior de Barranquilla, dirigido por José Eugenio ‘Cheche’ Hernández, extécnico de la selección de fútbol de Panamá (2004-2005). Según Vassilios Papadikis, directivo del campeón del Apertura 2011, el propio ‘Cheche’ quiere al jugador de 24 años, que podría ser prestado por seis meses con opción de compra.
‘Cheche es el más interesado por Vásquez. Estamos manejando los detalles del pase. Faltan algunos puntos, pero las negociaciones van bien adelantadas’, explicó el dirigente de origen griego.
Vásquez, quien estuvo en la convocatoria de la ‘Roja’ en las dos primeras fechas de la eliminatoria de Concacaf, aunque no jugó, sigue entrenando bajo las órdenes de Miguel Mansilla, técnico del club amarillo.
‘Vásquez será una gran baja en la zaga’, dijo Federico Marines, compañero de Eric.
Vásquez sería el sexto panameño en la actualidad en el fútbol colombiano. Román Torres (Equidad), Amílcar Henríquez (Atlético Huila), Nelson Barahona (Atlético Huila), Alejandro Vélez (Atlético Huila) y Eybir Bonaga (Boyacá Chico) son los demás panameños en Colombia.
‘Soy un profesional y Colombia es una liga de gran nivel’, dijo Vásquez.

lunes, 11 de junio de 2012

COLOMBIA.......DE VUELTA A LA REALIDAD


POR HUGO ILLERA
DIARIO DEPORTES
INFORMADORES DEPORTIVOS

Me quedó sonando la sentencia de Iván Mejía al final de la transmisión de Caracol Radio: “Pekerman es más de lo mismo pero más caro”. También releí la Sala de Redacción que escribí sobre el partido que Colombia ganó 1x0 a Perú. El colofón de la misma dice: “Ahora, hay triunfos que perjudican más de lo que pueden significar. Esperemos que este, no sea el caso. Recuerden que la burra era mansa…”. Hernán Peláez se preguntó por los 24 días de entrenamientos de la selección a puerta cerrada, recordó los micro ciclos y preguntó si habían valido la pena. César Augusto Londoño comentó que, por única vez, Pekerman tuvo al grupo de jugadores por más de tres semanas porque, de aquí en más, llegarán faltando dos o tres días y si no mostró cosas nuevas ahora, que tuvo tiempo, cómo hará después. En fin, me remito solo a los conceptos de mis compañeros de Caracol Radio pero bien podría hacerlo con el resto de los colegas de todos los medios del país. La conclusión, luego de la derrota de Colombia 1x0 ante Ecuador, fue de desencanto total. Cuando Pekerman se encargó de la selección, Colombia era 6ª en la tabla de posiciones. Hoy, dos partidos y cinco millones de dólares después, estamos en la misma posición y por fuera de los lugares que dan la posibilidad de ir al mundial.
Colombia, ante Ecuador, volvió a naufragar en la generación de juego y es un contra sentido. Lo mejor, supone uno, que tiene nuestro seleccionado son los jugadores de ataque que poseen, gracias al Dios del fútbol, la cualidad de hacer goles. Y los goles son los que ganan partidos. Pero, extrañamente nos hemos pasado los dos partidos vs. Perú y Ecuador viendo la manera angustiosa como Colombia se defiende más que con hombría y con ganas que con fundamento táctico.
Eso por el lado defensivo porque, por el lado del circuito ofensivo, el planteamiento y el desarrollo del mismo es de una pobreza inconcebible cuando se tiene a Falcao, uno de los mejores goleadores del mundo, a Dorlan, a James, a Ramos, a Muriel. Jugadores con gol. Padecimos, rezamos, prometimos mandas, besamos las estampitas de la Virgen invocando un triste gol.
Todo porque no fabricamos las oportunidades. No hay una idea clara para generar fútbol. Hay cosas que, en el juego, son claras y elementales y, sobre ellas, hay que montar los esquemas: recuperación del balón, tenencia, administración, generación de espacios, sociedades, profundidad en ataque y remate a gol.
Si el fútbol fuera tan primario, que solo fuera meter pelotazos y pelotazos, no se necesitarían a los directores técnicos tan veleidosos como “enreda la pita”. Y digo esto porque ante Perú la orden fue pasar de largo y meter pelotazos a ultranza buscando a Falcao. Sin sorpresa. Y frente a Ecuador se acercó más a James a Falcao, se suponía que también a Dorlan para utilizar dos posibilidades. Conectar a Falcao con generación de fútbol y espacios o a través de pelotazos (jamás hubo). Ni lo uno, ni lo otro y el pobre Falcao siguió deambulando en los partidos de Selección Colombia porque Pekerman no puede integrarlo al juego. James no pudo con el compromiso porque exageró su gestión individual y Dorlan se convirtió en uno de los dos guardaespaldas de Armero. Él y Soto no hicieron otra cosa que “marcar” a su compañero Armero para que no la embarrara. El remedio fue peor que la enfermedad. Parecía que Colombia jugaba con tres laterales izquierdos cual más ineficientes. Armero no marcó, Soto no apoyó y Dorlan no fue atacante, ni goleador.
Las tarjetas amarillas para  Yepes y Aquivaldo, que los inhabilitan para el próximo partido vs. Uruguay, develan que no existe un montaje real del circuito defensivo en nuestro seleccionado. Los jugadores hacen su “jugao”, a la buena de Dios, a lo que vaya saliendo y eso es fatal. A algunos les alcanza como a Aquivaldo, Yepes y Sánchez pero, hay otros cuyo nivel individual no da como Armero y Guarín.
No será fácil, le acaba de decir al fútbol a Pekerman. Si el argentino no se integra, si no termina de jugar al escondido, sino le baja a la prepotencia, sino se centra en lo fundamental estaremos a las puertas de una eliminación que será, igual de dolorosa, pero multimillonaria en perdidas comenzando por los cinco millones de dólares que se ganan él y sus 11 asesores.
No es por los periodistas, es por los colombianos que, a través de la prensa, se enteran del diario acontecer. No es por nada más. Y porque, si hay quienes piden que “dejen trabajar a Pekerman” (como si el periodismo estuviera empecinado en que no), el mismo Pekerman debe “dejar trabajar al periodismo deportivo” y, sobre todo, respetarlo. Es posible que, a partir de anoche, haya podido sentir lo que pesa el concepto del periodismo colombiano. Y es posible también que, por primera vez desde que llegó, se haya sentido solo a pesar de sus múltiples asesores. Si el periodismo puede tener acceso a los entrenamientos (no a todos por supuesto), y si puede conversar con él, a través de sus comentarios pudiera Pekerman  escuchar voces que no sean áulicas, que sean diferentes, incluso contrarias, para que pueda confrontar si sus ideas van o no por buen camino. Encerrarse es pretender una sabiduría absoluta que, evidentemente, es un error.
Ahora bien, ¿Qué le dejó a Pekerman el juego a la altura de Quito?. El equipo colombiano jugó a los 2.800 metros sobre el nivel del mar. Su rendimiento, en Quito, dio grima. ¿Insistirá en jugar en Bogotá?. ¿Cómo hará para adaptar a los jugadores con solo dos o tres días?. Y estoy preguntando por el plan científico, no con intención que no juegue con Uruguay en El Campín. Esa decisión es muy personal de él y para eso le pagan. Y bastante.
Desafortunadamente el partido que Colombia le ganó a Perú fue solo una ilusión. Un gol encontrado de milagro, hizo que se viera un oasis en medio de la aridez del desierto futbolístico de nuestro seleccionado.
Un camello, llamado Ecuador, nos devolvió a las arenas movedizas de un Clasificatorio al Mundial de Brasil que, hasta ahora, volveríamos a ver por televisión…
PD: El gesto de los jugadores del seleccionado colombiano de ir al banco de Ecuador a saludar y abrazar al DT Reinaldo Rueda, al AT Alexis Mendoza, al PF Carlos Eduardo Velasco y al EA Pedro Zape fue un bálsamo para ese grupo de buenos y eficientes  trabajadores del fútbol. Cuando los sacaron de la selección lloraron, me consta. Ayer, antes del juego rieron como poniendo punto final a ese trago amargo. Antes del juego. Después el juego, como buenos colombianos, supieron respetar el dolor patrio. Respeto, que no tuvieron otros, hace un tiempo